miércoles, 24 de diciembre de 2014



Y si te dijera que sos poder?


                                               


Sal al bosque Mujer.... 
Mujer , si, tú mujer, sal al bosque
ahora mismo
no temas
no tienes que temer a la intuición
cientos de mujeres han caminado estos lares
cientos de años
cientos de voces copulan con el misterio
ven mujer
sal , sal al bosque
deja atrás las convenciones,
dale muerte a la nena buena que solo te opaca
tú eres una loba, tú eres una bruja
deja atrás aquella que se amoldó a los ideales de otros
a la vida de otros y fue viendo como su vida se desdibujaba ante sus ojos
y hoy esta perdida en medio de la ciudad
sin olfato
sin intuicion
sin manada
sal al bosque, deja las maletas
te tienes a ti misma
tienes tu fe, tu piel
la madre tierra que acoge a todas las criaturas
te dará pan y sosten
te dará guia
tienes tu olfato
tu piel de loba malherida
tus huellas de tanta vida vivida y todas las que quieres vivir
sal al bosque, hoy, ahora, deja atrás las convenciones,
al diablo con la estabilidad que solo nos mutila los sentidos
que solo nos atrofia el sentimiento
no perteneces al río mas que para refrescarte
-el rio creativo fluye por tus venas-
eres parte de una manada y tus hermanas están por todas
partes
las encontrarás danzando desnudas a la luz de las lunas
las encontrarás
pariendo hijos, proyectos, alimentando sueños
las encontrarás
en medio del bosque arrullando a un niño
dándole de mamar a un sueño
las encontrarás
no temas
sal al bosque mujer, sal ahora, sal ya!!
atrás quedará la opacidad de la rutina, las voces deslucidas del conformismo
la malicia de aquellos que temen escapar del corral y por eso te azuzan con voces de miedo
tú eres una loba mujer, corre libre, busca tu manada, no precisas corrales ni certidumbres
corre libre mujer
corre libre
conecta tu útero a la tierra y vibra
deja caer las certezas a la tierra
siembra un sueño
arrúllalo una luna
y espera el milagro
-ves mujer, ya estás en el bosque....
reconoce el terreno
bienvenida a casa.. -
sal al bosque , mujer, sal ya
descalzate y empieza a correr.



Del Blog:  http://uteroymanada.blogspot.com.es



domingo, 2 de noviembre de 2014

No quiero un amor de película




Sin dudas, el séptimo arte nos ha cautivado a todos. Durante años sufrimos, nos reímos y nos enamoramos con las películas que narran amores desencontrados, histéricos, miedosos, celosos y demás adjetivos que le dan sustento a dos horas de actuación.

Cuando era chica quería que dos hombres se pelearan por mí, para sufrir en silencio, abrazada a la almohada por esa desdicha atractiva de sentirse doblemente deseada. Cuando me pasó, me di cuenta que no es tan lindo como me parecía tiempo atrás, por el contrario: los días no se pasaban rápido como en la película, no se me hizo tan fácil levantarme de la cama como la actriz que pasa del estado de depresión más profundo a darse cuenta en un segundo que todo puede cambiar y mejorar! Nada de eso, el dolor real es feo, sentirse un trapito de piso por amor no vale la pena (bueno, nada debería valer la pena, pero el tema de las frases y las palabras lo charlaremos en otro momento), estar tirada en una cama no es atractivo ni tan fácil como parece: en la película la chica deja de trabajar o hace un viaje épico donde conoce, ahora sí, al amor de su vida. No fue mi caso, yo tenía que ir a la facultad, ir a un trabajo donde no podía tener la mirada perdida pensando en lo que pasó, debía subir y bajar de colectivos repletos de gente (y no, en ninguno estaba mi príncipe azul). Fue así que la peor experiencia de mi vida se convirtió en el puntapié de una nueva forma de vivir: comencé a preguntarme qué era esto del príncipe azul, qué era el amor, qué significaba amar y cómo quería amar a un hombre y ser amada (amor, amor, amor, amor, amor).

Descarté las películas, los amores de novela y las canciones de sufrimiento que evocan amores dudosos: "Sin tí me muero", "no me dejes vida mía", "te preciso para vivir", "después de tí no hay nada". También eliminé las escenas no deseadas en mi vida (y siguen eliminadas al día de hoy), como la imagen de la mujer que corre y el hombre la persigue o la típica escena donde ella lo ama pero le dice que lo odia y él... frente a semejante declaración se guarda su amor y le dice que su odio es recíproco.

Supongo que no quiero un amor de película porque ya lo tuve y eso es parte de mi pasado. Fui protagonista de esas películas donde se gasta más energía en la actuación que en lo lindo de la vida. Y hoy el amor lo concibo de otra forma: disfruto junto a mi pareja de una libertad real, donde nos reconocemos como dos personas completas que eligen vivir juntos, con espacios personales, mezclados, entreverados, aislados... sin cosas bien o mal, simplemente deseos, ganas, momentos. Sabés lo que significa que hagas lo que hagas no hay una etiqueta que indique que eso es bueno o malo? Simplemente es. Y es porque somos, y porque cada uno tiene su mochilita donde va cargando y descargando cosas a lo largo del camino.

Hoy disfruto de un amor honesto, sin teleteatro ni escenas de novelas, sin fantasmas del pasado, sin miedo a nombrar a aquellas personas que me enamoraron y también marcaron mi vida... Hoy disfruto de un amor libre, risueño, lo disfruto a carcajadas, con besos simples y abrazos, lo disfruto sin medirlo sexualmente... Quién dijo que el sexo es el termómetro que indica que hacemos las cosas bien?  Lo que nos marca el amor son los hechos cotidianos, las miradas, los abrazos, las palabras, las risas, las lágrimas, el desnudarnos frente a la otra persona en todos los sentidos imaginables.


El amor es un universo y hoy habito cada rincón de él.







miércoles, 29 de octubre de 2014

Momentos felices

Me encanta escuchar a la gente al pasar... porque capto partes de frases ya escuchadas en otros momentos y vuelvo a reflexionar sobre ciertos temas.

En este caso, la frase que suelo escuchar dice: "no existe la felicidad, existen los momentos felices", esta afirmación me llama la atención y me lleva a divagar largo y tendido sobre algunas cuestiones.

Por qué creemos que no existe la felicidad como estado permanente, con sus idas y vueltas, altibajos, atenuantes, etc? Si el estado de base no es la felicidad, cuál es? la tristeza? la melancolía? Esa es la pregunta que le haría a las personas que dicen que la felicidad viene de a momentos. Pero como les dije, son frases que escucho al pasar y no me imagino diciéndole esto a la persona (y mucho menos obteniendo una respuesta).

Yo soy feliz. Sí, a veces me levanto triste, perdida, desconectada.... pero mi estado natural es de felicidad, los momentos que sobrevienen de vez en cuanto son los de tristeza.... al revés de lo que piensa mucha gente: que la felicidad son momentos. Tal vez sería bueno cambiar de paradigma, romper con esa creencia y poder decir que somos felices pese a los momentos de tristeza.







jueves, 16 de octubre de 2014

¿Por qué existimos?

A veces me pasa... pienso de más. Mi cabeza se va por las ramas de la existencia humana, pretendiendo dar respuesta a cosas que no sé si tienen una explicación que esté a la altura (baja altura) de nuestro entendimiento.

Tengo mis días, a veces puedo estar muy concreta y entender a la perfección como funciona el mundo, pudiendo ser funcional a la sociedad llegando a inventar nuevas reglas que me parecen fácil de seguir.... hasta que al otro día me levanto y no entiendo muy bien qué sucedió con mi insight del día anterior, me siento confundida, como si toda la felicidad del día anterior no hubiese sucedido y existir se hiciera difícil.

Mi duda existencial es: podemos elegir estos momentos o somos frágiles víctimas de diversos estados de ánimo que no elegimos? Podemos sanar esa fluctuación que va de un polo al otro, arrastrándonos por las diversas capas de la existencia?



domingo, 14 de septiembre de 2014

❤ Abrete Corazón ❤



Hoy sentí la angustia en mi cuerpo. Se generó en mi panza, en el centro de mi estómago, recorrió mi corazón, la sentí en mi espalda, en mis brazos, rozó mis hombros, acarició mi garganta y se materializó en unas pocas lágrimas, que recorrieron mi rostro. No sequé esas lágrimas, venían conteniéndose hace rato y creí necesario disfrutar del momento. Duele, sí, pero esa dulce y triste angustia nunca había fluído por mi cuerpo, por el contrario, se había estancado y, producto de eso, todos los procesos de mi cuerpo eran más lentos.

La angustia, pienso.. y siento, se produjo por una situación que está fuera de mi control, también porque del otro lado hay un amor familiar muy grande y por último, el detonante, porque no veo una solución posible. No creo que importe el por qué de esa angustia para este relato: pero sí lo que eso me dejó, esa huella de enseñanza que podemos ver los que estamos convencidos de que siempre hay algo más detrás de cada situación vivida. 

No puedo cambiar la situación que me toca vivir, el por qué me lo pregunto desde hace años, barajando diferentes teorías e hipótesis que calmen mi dolor... tan sólo queda recordar que somos seres espirituales viviendo una vida terrenal, que las cosas cotidianas que vemos "importantes" no son más que ilusiones de este mundo material.

Quiero compartir con ustedes una reflexión de Sri Sri Ravi Shankar y luego una canción intensa, fuerte y suave a la vez que permite disolver el ego, ese velo que nos impide sentir y ver con el corazón.

"Observa a tu propia vida en relación al tiempo, han pasado millones de años, y millones de años pasarán. ¿Cuánto puedes vivir? ¿60, 70 o 100 años? Es insignificante. No es siquiera una gota en el océano. Y en relación al espacio, directamente ni existes. Entender esto disuelve el ego. El ego es ignorar la realidad, ignorar tu verdadera existencia. Ahora, solo con tener conciencia de esto, ¿es suficiente? ¿hay que hacer algo más? Simplemente abre tus ojos y pregúntate ¿Quién soy? ¿Cómo llegué a este planeta? ¿Qué es la vida? Entonces surge un estado de conciencia en tu mente, y dejas de preocuparte por pequeñas cosas como “Esto y aquello me pasó con tal y cual…” todas estas pequeñeces simplemente se desvanecen y serás capaz de vivir cada momento de tu vida. La vida gira en torno a su contexto. Debes ser feliz. Todo en la vida tiene altos y bajos, es normal. Tenemos cuerpo, este se resfriará, tendrá tos, fiebre, u otra cosa, luego se pasará. Pero la felicidad es algo que es inherente a ti. Tu cabeza estará en el lodo en un par de años, ¡no llenes de lodo tu cabeza ahora que aun estás con vida! Si puedes reflexionar acerca de tu vida desde una perspectiva más amplia, tu vida mejorará."



domingo, 31 de agosto de 2014

Un rayo de luz

Hola! Bienvenido a este espacio tan personal. Muchas veces uno simplemente quiere expresarse, no para ser leído, admirado, criticado u observado, sencillamente es un impulso, una necesidad que no requiere de muchas explicaciones más que el simple acto de expresarse. Y así como hoy cuento mi historia, mis sensaciones, mis pensamientos, tal vez vos del otro lado te identifiques con ellos, los rechaces o simplemente las palabras sean sólo una sucesión de letras.

¿Estás feliz con la vida que llevas?, ¿Sonreís cuando hacés un repaso de tu vida?... ¿qué sentís en este momento con esta pregunta? A mi la vida no se me hizo fácil, siempre fui muy sensible, estaba atenta a las necesidades de las otras personas, era de las niñas fácilmente admiradas y queridas por ser obediente, correcta, empatizar con los adultos y ser capaz de llevarme mejor con la gente grande que con los de mi edad, tal vez porque se hace más fácil vivir en el mundo de los adultos, es sencilla la explicación: los adultos pocas veces son espontáneos, se reprimen las risas a carcajadas, no sobresalen por andar sonrientes en un colectivo lleno de caras pensativas, amargadas o alejadas del aquí y ahora. La naturaleza de los niños es otra, totalmente distinta: ellos juegan sin importar si los miran, porque ellos no miran al resto, juegan con el resto; son brutalmente honestos, y si bien eso puede ser muy doloroso a veces, sabés que cuando se ríen lo hacen también espontáneamente, no buscan agradar, simplemente son, existen.

Hoy me voy a reír como una niña, sin importar qué piensen.